- ¿Recuerdas aquel día? tenías siete años.
A alguien se le ocurrió comentar en la mesa que al que le salía la sorpresita tenía que pagar el roscón, y tú estabas deseando que no apareciera en tu trozo, pero cuando echaste un vistazo entre la nata casi se te saltan las lágrimas al pensar que todos tus ahorros estaban sentenciados. Pensabas que nadie te miraba cuando escondiste aquella pequeña corona entre tus manos y creíste engañarlos cuando mentiste al decir que no estaba en tu trozo. Ese día todos simularon desilusión al no encontrar la sorpresa en ninguno de los trozos, e hicieron tan bien su papel que acabaste sintiéndote culpable y confesando que te había salido a ti, pero que no podías pagar el roscón. Todos rieron; tu no.
- ¿Y recuerdas la época en que tanto en el roscón de reyes como en el de tu cumple salían jarroncitos en miniatura y vasijas varias? para nosotras siempre era bastante decepcionante, pero a mamá le gustaban y los tenía todos puestecitos en una estantería junto a la tele.
- Al que no le gustaban tanto era a papá, al que se le olvidaba mirar dentro del trozo antes de morder, ¡y acababa haciéndose daño en un diente todos los años!
- Y nosotras lo mirábamos esperando ese momento para reírnos de su despiste mientras mamá le echaba la bronca.
- ¿Tú crees que nos engañaba?
- No sé... ya sabes que papá es muy raro, pero tal vez sí.
- Y mira esta bailarina gordinflona. Me salió a mí en aquellos años en los que eras gimnasta, y al verla grite, ¡mira!, una figurita igualita a ti cuando bailas
- Cuando la vi me llevé una gran decepción y me enfadé bastante contigo.
- Me encantaba hacerte rabiar, pero no me culpes, yo solo hacía lo que tenía que hacer, eran mis funciones como hermana mayor.
- En muchas ocasiones te odiaba.
- Tranquila, yo a ti también, pero era un odio de los buenos, si es que eso existe.
- Y aquí está mi preferida. Me encantaba esta estrellita que brillaba en la oscuridad.
Recuerdo que cada noche me metía bajo la sábana y la observaba brillar a oscuras, pero temía que se le gastaran las pilas, así que solo la tenía durante un par de minutos. Cuando me enteré de que no se gastaba me sentí poseedora de un objeto realmente mágico, y se convirtió en mi mayor tesoro. No sé en qué momento lo olvidé, incluso pensaba que estaba ya en la basura.
- ¿Y el día que me salió un haba seca? pensaba que había sido una broma, pero mamá me dijo que era afortunada, que esa haba me traería suerte si la llevaba conmigo. Y así lo hice durante mucho tiempo, ¡hasta le puse nombre!
- La verdad es que nos encantaba el día de reyes.
- En realidad durante los años que trabajaste en la pastelería aprendiste a odiar ese día y cualquier otro que conllevara el tener que hacer roscones.
- Y sigo odiándolo.
- Y a ver qué más hay en la caja... una pareja de ciclistas, unas tacitas de café con imán, un elefantito verde, un patito, un duendecillo, un Papá Noel, y mira....la mariposa roja. La queríamos las dos, así que mamá se la dio a nuestro hermano, quien acabó rompiéndola.
- Sí, y luego la pegamos pensando que no aguantaría, y mírala, tantos años después aquí sigue...
- A mi me sigue gustando
- Y bueno, ¿qué hacemos con ella?
- Ponla en la caja con el resto, no te molestes en sacar nada, mejor vamos a tirarla tal cual.
- No puedo….
- Ya lo hago yo, pero alguien tiene que hacerlo.
A veces en mis sueños hay extrañas coincidencias.
ResponderEliminarSoñe esto el otro día. Soñé que hacía limpieza con mi hermana pequeña y tirábamos a la basura una pequeña caja de recuerdos.
Al día siguiente comí con mis padres y mi madre sacó una de sus cajas de "tesoros" en el que aparecían todas las sorpresitas que a lo largo del tiempo nos habían salido en los roscones, junto a muchas otras pequeñas cosas y de escaso nivel monetario.
Hoy le he pedido que sacara de nuevo la caja para poder hacer una foto y hemos recordado mas historias relacionadas con roscones, pero no todas caben aquí.
Por cierto, que me ha tocado de nuevo la sorpresa, y de nuevo me han dicho riendo que me tocaba pagar. Increible que siga creyéndomelo después de tantos años...
pues en mi casa este año no ha habido roscón de reyes, estamos todos a dieta y a los nenes no les hace gracia el dulce.... tendré mala suerte??
ResponderEliminarMe encanta este sueño. Porque me recuerda cuando me junto con mis hermanos y mi madre, y nos ponemos a recordar buenos tiempos. Un besazo guapa y feliz fin de fiestas.
ResponderEliminarAh, ¿o sea que esto era un sueño? (Nunca me fijo en las etiquetas, como las pones encima...) Parecía tan infantilmente real, salvo lo último; no sé, no te imagino tirando una de esas cajas de trastos con memoria.
ResponderEliminarEn cuanto a los roscones, parece ser que ahora meten dos sorpresas en vez de una. De lo contrario no me explico como ayer anoche salió una y hoy, mientras comía un trozo a la tarde, otra (la he masticado primitivamente hasta darme cuenta de que aquello, de rosco, no tenía una mierda xD).
Dani pues en el mío solo salió uno!!! mi hermana que trabajó años en una pastelería me decía que dependiendo del tamaño en algunos metían hasta tres, así que será que lo tenías muy grande, enhorabuena!! al menos no te has acabado fastidiando ningún diente, no?? jajaja
ResponderEliminarY sí, es un sueño, pero bastante realista en este caso. Las historias en su mayoría sí son realidad.
Cris Pues justo la tarde noche de ayer en mi casa fue algo así, con mi hermana y mis padres y recordando viejos tiempos. Mejores o peores no lo sé... pero pasados sí.
Juana niños a los que no les gusta el dulce!!! debo decir que menuda suerte! para mí es una perdición, me encanta!
Si la mala o buena suerte cupiese en un roscón, cuanto nos evitaríamos!
aiii que bonita entrada jo, que nostaligica ejjee
ResponderEliminarMe gustó. Un saludo, Neko.
ResponderEliminarLos recuerdos no se tiran a la basura. Al menos los buenos y en esos tuyos hay de todo. Desde fuera parecen agridulces pero también parecen nostálgicos. Desde luego nada simpáticos para el encargado de hacer los roscones. A mí me faltaban muchos recuerdos de infancia con el roscón porque me he comido pocos de esos (gracias aparte). Los tuyos me han encantado.
ResponderEliminarLa caja irá a un contenedor, pero cada instante feliz...se quedará contigo.
ResponderEliminarPor cierto, en mi caja "imaginaria" guardo para siempre una estrella con mi nombre que me regaló una amiga especial.
Un beso.
Salu2
Pero vamos a ver, de todalavidadeDios, al que le sale el haba la paga y al que le sale la figurita se corona reu por un día.
ResponderEliminarY que conste que yo he tomado el roscón en Zaragoza, en Madrid y en Barcelona.
¿Que pastelería era esa?
Tus sueños siempre son sorprendentes.
Feliz año.
Así que... quitando porquerías de la casa ¿noo? Los recuerdos pueden ser presiosos u horribles, pero no ocupan sitio. Las tonterías si y al final terminan en la basura.
ResponderEliminarQué preciosa entrada. Hoy leyéndote me ha tocado a mi el regalito. Sorprendes siempre
ResponderEliminarUn abrazo
Entrañable esta biografía onírica que nos hace recordar.
ResponderEliminarJoder, mira nena, entre las coincidencias raras y los asesinatos cada día a) te tengo más cariño b) me das más miedo. ¿Eso es compatible? Hum!
ResponderEliminarMuchos besitos, Neko bonita.
¡la de historias que caben en una caja de sorpresas de roscón! Muy bonita la entrada.
ResponderEliminarBesos
pues a mi me tocó un pin del real madrid, aunque, digamos que no me hizo mucha ilusión! fútbol hasta en el roscón, vamos.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEs una de las conversaciones mas bonitas y crueles (en el fondo) (o al final) que he leído en mucho tiempo, que sentimientos despiertan las cosas mas pequeñas e insignificantes, yo tengo un recuerdo odioso de un día de reyes, estaba con mis patines en la calle, los que me habían traído los reyes y que mi madre me dejó como unos dos minutos ponerme y salir a las 12 de la noche en pleno mes de enero ¬¬ (que huevos tenía yo....vale sigo igual, pero ahora eso no viene al caso) total, que estaba yo tan contenta con mis patines, cuando una vecina de unos cuatro años mayor que yo, me viene y me dice: "Con esas piernas torcidas, jamás podrás ser otra cosa en la vida que no sea detrás de un mostrador, olvídate de patinadora, de modelo o bailarina, porque vas de culo. Ah! y solo te lo estoy diciendo por tu bien" Se cogió su mochila y se fue a casa.
ResponderEliminarYo no lloré, tampoco me lo tomé muy en serio, pero no sé cual es el motivo por el que aun lo recuerdo como si hubiese pasado ayer, y eso que todo lo relacionado con mi infancia lo he borrado, al parecer esa mierda no.
Y después de mí vomito "verborreico" (lo siento) que sepas que esa caja de recuerdos varios debería quedarse donde está, quien sabe lo que despertará dentro de otros tantos años más :DD
Besazos mi chica guapa y feliz fin de semana :D
(Perdona por el coment anterior, pero se me corto el comentario ¬¬)