Me citan en el culo del mundo a las 18:30.
Cinco minutos antes de la cita estoy allí e intento buscar una puerta por la que entrar al edificio, pero todo está cerrado. Desconcertada doy media vuelta comprobando si me he equivocado de edificio (no sería la primera vez) hasta que escucho pasos a mi espalda que me buscan.
Cuando me acompaña a la sala en la que debo esperar me doy cuenta de que en ese momento están realizando otra entrevista, y a través de los cristales reconozco a uno de mis compañeros de trabajo en la sala contigua. La pared es un simple cristal traslúcido, por lo que escucho completamente la entrevista; ese es el primer momento en el que pienso que las maneras de esta empresa no son serias.
Tras media hora esperando y rabiando por llegar tarde a clase de fotografía entran en mi sala las dos señoras, Comecarroña y Apuntadora.
Comienza la entrevista.
- Supongo que ya sabes cual es la situación de tu empresa y que la nuestra se queda con el proyecto que llevaba tu empresa y en cual trabajabas.
- Sí, mas o menos estoy enterada.
- Bien, cuéntanos algo sobre tu formación y el puesto que desarrollabas en el proyecto.
- Blablabla
- ¿Y cuanto tiempo te costó adaptarte al puesto que ocupabas? (seguro que está pensando: vamos a ver si contratando a un novato nos ahorramos a alguien mas caro)
- Pues no recuerdo. Unos meses.
- ¿Y por qué te sacaron del proyecto?
- Debido a una rebaja de presupuesto del cliente tuvieron que recortar el equipo.
- ¿Y en ese proyecto con quién trabajabas? (como si no lo supieran de antemano teniendo gente que trabajaba con nosotros…)
- Pues con Asterix, Obelix e Ideafix. (lo apuntan las dos en sus papeles… raro)
- ¿Podrías decirnos una cualidad que caracterice a cada uno de ellos? (¿¿¿qué???)
- Emmmm, no sé, son los tres buenos compañeros de trabajo y he trabajado muy a gusto con ellos.
- Pero algo mas concreto, seguro que después de tantos años puedes definirnos de alguna manera. ¿Con qué palabra definirías a cada uno?. (y me pregunto quien le interesa realmente a esta tía, yo o mis compañeros… que tontería me pregunto, desde el principio sé que si ellos continúan ahí es por algo)
- Bien, pues Asterix es muy trabajador, Obelix sabe muchísimo de su trabajo e Ideafix es una persona muy organizada. (que tonta soy, ¿por qué he acabado diciéndole nada? Malditos nervios…)
- Entonces quieres decir que Obelix es mejor que Asterix….
- No, no, yo he dicho eso.
- Ya bueno, pero sí que podríamos decir que si tuvieras que poner a uno de los tres de jefe sería a Ideafix debido a que es el mas organizado…
- Tampoco he dicho eso.
- Vale, pero volviendo al asunto, si tuvieras que dejar fuera a uno de ese equipo, ¿a quien sería?
- A ninguno; los tres son competentes y eficaces.
- Pero seguro que hay alguno que lo esté menos. (ya empiezo a estar hasta los cojones de esa empresa, creo que aunque me ofrecieran el puesto se lo podrían meter por el culo)
- Pues entonces tal vez me eliminaría a mi misma.
- Pero…. estás compitiendo por el mismo puesto que ellos, no puedes decir eso, ¿es entonces que no te ves capacitada para esa responsabilidad?
- Claro que me veo capacitada, llevo haciendo eso seis años, pero ellos son tan capaces como yo.
- ¿Y qué estas haciendo ahora mismo?
- Estoy con formación interna en la oficina.
- El ambiente allí debe ser muy malo, ¿verdad? Porque claro, toda esa incertidumbre de no saber cuanto aguantará la empresa en pie, porque cuántos estáis en la oficina.
- No sé, no me acuerdo.
- 27. Están 27 (¡vaya con la Apuntadora!)
- Uffff que mal, y todos allí parados sin hacer nada todo el día, se debe estar fatal en esa situación, ¿verdad?
- No, te equivocas. Estaremos 27 pero no estamos todos parados. Y no, el ambiente no es malo dada la situación que vivimos.
- Aun así cuanta gente hay parada en total, ¿un 70%?
- Sí (joder, pero si sabe mas que yo…)
- Pues es que así no se puede aguantar mucho tiempo, porque además vuestra coordinadora es un pelín incompetente, porque quién manda mas ahí, ¿ella o vuestro jefe de proyecto?
- Pues no sé, supongo que cada cual mandará mas en lo que tenga que mandar…
- Bueno bien, ¿Cuánto cobras actualmente?
- Mmmm xmil. (como si no lo supieras…)
- Hemos dispuesto un salario que no admite ningún tipo de negociación para cada uno de los puestos, así que vamos a pagar en función del puesto y no de la experiencia que esa persona pueda tener, aunque sea en ese mismo puesto.
- …… (genial, pues contrata a alguien que no sepa nada y no te aproveches de la gente)
- Muy bien, ¿y cuanto estarías dispuesta a rebajar tu sueldo actual para optar al puesto? (¿cómo? Creo haber escuchado mal, ¿que cuanto estoy dispuesta a dejarme pisotear por vosotros? eso es un buen buitre... ofrecerle a un programador con seis años de experiencia en un puesto concreto 15000 putos euros. De VERGUENZA a lo que se ha llegado en este país, me dan ganas de decirle que no hace falta que me pague, que ya trabajo gratis si eso)
- NADA.
- Ahhh…. Bueno lo apunto. Y a pesar de saber la situación de tu empresa, sigues opinando eso. (apunta, apunta, pero deja que me largue ya... a ver si aún llego a fotográfía, y a ver si al siguiente eres capaz de meterle mas miedo del que intentas meterme a mi)
- SI.
- Vale, muy bien. Ya te llamaremos para decirte algo.
- Ok. Hasta luego. (tranquila, ni me llamarás, ni espero que me llames, ni quiero tu mierda de limosna.)
Hasta aquí a las agresivas tácticas que los departamentos de recursos humanos pueden llegar para conseguir demostrar quienes son los que mandan sobre quien. El intento de presión y de miedo por su parte son vergonzosos, el de que nos apuñalemos los unos a los otros; gente con la que he trabajado durante seis años, pero también reido, disfrutado y aprendido... y poco mas que comentar sobre las entrevistas que son meramente un recurso para obtener información y ayudarles a hacer su elección, en la que claramente no estaba desde el principio.
Y aunque me lo ofrezcan, por mi pueden meterse su puto trabajo por el culo; si necesitan a alguien desesperado, cubierto de miedo y al que arrebatar su dignidad como trabajador, que sigan buscando.
(Si en algún momento llego a completar dos años en paro, ya veré donde guardo la dignidad, mientras, intentaré conservarla)