lunes, 3 de mayo de 2010

Buenos días, Sr. Cabrón

Mira que odio la hipocresía y que la gente sienta esa necesidad de caer y que le caiga bien todo el mundo.... pero hay veces que no hay mas remedio para seguir en el juego de la sociedad.

Casi a diario me cruzo con un señor del trabajo, por llamarlo de laguna manera, al que saludo cordialmente con una sonrisa y deseándole buenos días, y tras lo cual siempre finalizo el saludo con un inaudible "cabrón"

¿Por qué? Porque se lo merece, porque me encantaría saludarle con un buenos días, Sr. Cabron, mirandole fijamente a la cara si ello no me acarreara ningún tipo de problema, pero, no claro, no puedo hacerlo.

1 comentario:

Si aún respiras... demuestramelo